Porque hay a quien le gusta el olor reciente de un café cortado. Porque hay quien grita "touché!" cuando se encuentra una mirada diferente. Porque cruzar en rojo da la vida y con los ojos cerrados se llega antes a ese otro lado adictivo, furtivo y agridulce. Porque las entrelineas guardan los secretos y ayudan a imaginar. Bienvenidos, pasen y lean...

10 febrero 2008

COMO BESTIAS EN CELO

Bailó durante horas como si nada le importase, mientras la noche iba adentrándose en lo más profundo de su propia existencia, allí donde los gatos pardos se confunden con retales de piel en la pared. Se despeinaba contando los ojos ajenos que rondaban su cintura, esquivando dedos que creían ser más listos que la apuesta de sus piernas de tequila.
Estrechó la mano de dos tipos con corbata después de hablar de dinero, tarimas y casualidades y siguió matando bares con la luz de las bombillas hasta el siniestro surrealista de un choque de ojos.
Se ahogó en su Hierro, en sus eses, en el tacto de un chaleco, en el cuero de un collar, en un cuadro de letras, en colores descarnados, en la carne de su cuello. Se rindió a los seis minutos y empezó a tener miedo de no querer dejar de escuchar, de hablar, de estar, de ser, de morder, de respirar...
El sol salía de su guarida mientras caminaban por calles que no conocían, sin importar el trozo de Roma en el que desembocasen. Los camiones descargaban cajas de fruta, los niños cargaban con la mochila, los coches, los perros, los bancos...La ciudad amarilla despertaba frenética y ellos andaban despacio. Él la agarraba del hombro y le acariciaba la cara, ella buscaba el calor de su pecho introduciendo la mano entre dos botones de su cazadora. Mil miradas les fulminaban a cada paso y ellos no podían evitar reírse del reloj y los horarios. Se despidieron con un beso en un portal jugando con la suerte entre los dedos.
A mitad del día el teléfono sonó dos veces. Cuando colgó se quedó sentada en el sofá, con un café en la mano y una sonrisa extraña. Mientras mojaba los labios en el aroma que brotaba de la taza, veía cómo su caja de secretos estaba a punto de explotar, su estómago colgando de un hilo y los caminos raros reproduciéndose como bestias en celo.

17 comentarios:

.JL. en los afelios dijo...

Lo sé. Hemos sido extranjeros
hablándonos por señas demasiado cercanas,
ansiosos en las calles
de una nueva ciudad,
esperando tal vez que nos fotografíen
delante de este amor y de sus cicatrices,
eso que confundimos con nuestros sentimientos
o acaso
-en noches de locura-
con una sensación de humedad en los ojos.

Pero en pocas palabras se resumen
casi todos los días,
sus sílabas contadas en mis versos
y la felicidad.
Tibiamente el tiempo
nos descubre
que nada existe ya sin tu sudor
y puede que no el mio.

Que somos todavía demasiado solemnes
cuando nos sorprendemos
temblando de pasión,
llenos de instinto mal disimulado.

Pasan lentos los coches.
Oigo también
tu corazón lejano
pasar de madrugada la vida
y me asombra la sombra
de tanta intimidad...

liz_ dijo...

Impresionante, de verdad que me quedo sin palabras despues de leerte, solo puedo deicr, Bravo!!!, y dar las gracias por compartir tus escritos.

Que no pare la música... y los pies se hagan de piedra sobre suelos mojados de sudor.

voy por otro téquila, a tu salud!

Miguel Rodríguez dijo...

siempre que te leo me siento rojo.


un gustazo.

Belén dijo...

Y lo bien que sienta el café que? ;)

Besicos

DaViD CaNo dijo...

Las ciudades con ese halo de soledad, con esa atmosfera del gran ojo que nos mira, con esos patrones que se repiten en otras latitudes:

"Los camiones descargaban cajas de fruta, los niños cargaban con la mochila, los coches, los perros, los bancos..."

A veces nada más se trata de dejarse guiar por las señales neón, hasta que nos alcance la luz del día...

Saludos

Bachatadharma dijo...

Hola pintora de realidades.
En la ciudad amarilla contrastan bien las aventuras con tonos acolorados.

Cuestión de juegos de luces.

;-)

Dr. Durden dijo...

Me encantas psicótica rojiza.

MBI dijo...

Visita inesperada.

Reno dijo...

"...veía cómo su caja de secretos estaba a punto de explotar..."

* Pues eres muy precisa.

Adrià dijo...

Esteeee no es que yo reclame los 5 minutos que cada uno con su tempo...juas!.

Me encantó, y estás fatal a partes iguales.

Tristancio dijo...

Y así cruzamos la noche, escondidos de nadie, y de todos... escondidos al fin y al cabo.

Cruzamos la ciudad, la misma ciudad y mil ciudades distintas, que se despereza y se extiende como perro al sol...

En los bolsillos, nuestros dedos juegan con frágiles secretos.

Y yo busco, tras los renglones de tu historia, alguna certeza que permita a los seres que me cuentas, seguir cruzando las horas del día... hasta la noche.

Un abrazo.-

vega dijo...

ohhhh
he llegado tardísimo a leerlo, y ahora me arrepiento!!!

una fiera en celo... (o varias)

Mercredi dijo...

Cuando un desconocido se convierte en...En qué? Porque cuando se pasa de las miradas...Qué es?No es amigo, no es amante más allá de una noche...Es curioso.Y es hermoso no ser consciente del horario ni necesitar serlo.
Todo va bien mientras el tequila no nos haga resbalar durante el baile,xD

Quejio dijo...

Buenas ...

Siempre es una aventura visitar tu blog. Aunque en estos últimos meses no haya dejado huella, mis ojos han disfrutado de tus escritos y de tus aventuras con otra mano loca que no deja indiferente ante tanta buena, bonita y canalla poesia. Chapó!

Lunazo pá ti.

Fernando García-Lima dijo...

Estaría bien estar presente cuando explote esa caja de secretos :-)

¿O no lo recomiendas?

Besines

LoOla dijo...

..Y luego dicen que yo soy demasiado pasional...

Sam Ordet dijo...

qué pasión!!! un saludo